Los patrocinadores de los planes de pensión corporativos han observado un incremento en la volatilidad del estado de los fondos en años recientes. Si bien los mercados accionarios han contribuido en cierta medida a la volatilidad, las tasas de interés decrecientes que aumentaron el valor de los pasivos han sido un impulsor clave en las reducciones del estado de los fondos.

Entre otros factores, los patrocinadores de los planes pueden haber experimentado diferentes grados de volatilidad dependiendo de la estructura de las inversiones de renta fija. En el entorno actual de tasas de interés, a menudo escuchamos preguntas recurrentes referentes a la renta fija y queremos compartir lo que nos ha resultado útil en cuanto a la administración de los resultados de los planes de pensión.

1) ¿Tiene sentido invertir en bonos de larga duración hoy en día?

Sí, los bonos de larga duración siguen siendo la inversión preferente para las inversiones de renta fija de las pensiones. Los pasivos por pensiones se comportan como inversiones en bonos, por lo que el valor del pasivo representa el valor actual de los pagos futuros a los participantes según los rendimientos actuales. Como se ilustra en el siguiente gráfico, los pagos futuros de una pensión se extienden a lo largo del espectro de plazos de vencimiento, donde una gran parte del riesgo de las tasas de interés (86 % en el caso del ejemplo que se presenta en el gráfico) se ubica en el extremo más prolongado de la curva de rendimiento en el caso de un plan de pensión promedio. Tener bonos de corta duración, como los que están referenciados en el índice de bonos agregados Bloomberg Barclays US y que tienen vencimientos inferiores a 10 años, significa que la mayor parte del riesgo de las tasas de interés del plan es un asunto que sigue sin ser abordado.


 

Fuente: PNC / Ver la versión accesible de este gráfico.

Pagos de beneficios proyectados para un plan hipotético. Las proyecciones anteriores son de carácter hipotético, no reflejan los resultados reales de un plan y no se deben tomar como referencia para ningún fin.

Algunos patrocinadores de planes han indagado si un incremento esperado en la tasa de interés respalda la opinión de que la duración de la renta fija debe ser más corta que el pasivo del plan. La preocupación es que los bonos de larga duración pierdan valor, y parte de dicha pérdida se podría evitar en un entorno de tasas de interés crecientes al tener bonos de corta duración.

Considera que las tasas de interés pueden tener tres posibles trayectos, es decir, podrían ascender, permanecer estables o fijas dentro de un rango, o disminuir. Si bien es difícil predecir el trayecto esperado de las tasas, cualquiera de dichos trayectos es posible.

Para que una posición de corta duración beneficie a un plan, las tasas de interés no solo tendrán que aumentar, sino que también tendrán que aumentar a un ritmo más rápido o conforme a una magnitud mayor en comparación a los precios que el mercado ya ha descontado en la curva de rendimiento. Ese es un trayecto pronosticado que muchos patrocinadores de planes no están dispuestos a aceptar debido a la complejidad de los factores que dirigen las tasas de interés. Por tal motivo, y debido al posible efecto negativo en el ratio de financiación que puede generar una cartera de corta duración, seguimos considerando que los bonos de larga duración representan la inversión de renta fija adecuada para un plan de pensión, incluso ante el entorno actual de tasas de interés bajas.

2) ¿Qué importancia tiene la administración activa?

En nuestra opinión, es importante mantener la administración activa de las asignaciones correspondientes a renta fija. La implementación pasiva de esta clase de activos en particular por lo general no es eficiente. La mayoría de las carteras de larga duración de los planes de pensión constan principalmente de crédito corporativo, debido a que los pasivos de las pensiones se basan en los rendimientos de los bonos corporativos de alta calidad. El impacto del impago y de la reducción de las calificaciones de los bonos podría generar un obstáculo con respecto a las posiciones de los fondos de las pensiones si estas no se administran adecuadamente. Cuando se reduce la calificación de un bono corporativo, el valor de la cartera disminuye, lo cual se intensifica si el administrador del fondo vende el bono con una pérdida tras ocurrir la reducción de la calificación. Sin embargo, es posible que los pasivos aumenten si dicho bono se sale de la curva de rendimiento de alta calidad que se utiliza para medir los pasivos. Para evitar las disminuciones excesivas en el estado de los fondos (debido a que se tienen menos activos y más pasivos), es importante emplear la administración activa a través de un administrador que tenga experiencia en la venta de bonos antes que se reduzca la calificación de estos y en cómo enfrentar el volátil mercado de renta fija.

3) ¿Es necesario personalizar los pasivos del plan?

En nuestra opinión, la personalización de la cartera de renta fija con respecto a los pasivos del plan es una mejor práctica. Una solución completamente personalizada gestiona la cartera de renta fija teniendo en cuenta la exposición del plan a lo largo de la curva de rendimiento completa. Retomando el gráfico que muestra la exposición al riesgo (duración) correspondiente a un ejemplo de plan de pensión, comprar un fondo de bonos de larga duración que tenga una duración aproximada equivalente al pasivo (es decir, 13.5 años en el caso del ejemplo) no genera el mismo efecto que una cuenta de renta fija completamente personalizada que coincida con la exposición a lo largo de la curva de rendimiento. Esto tiene una importancia particular en un entorno con tasa de interés volátil.

Los fondos de bonos de larga duración que están referenciados a los índices estándar del mercado analizan el rendimiento de los bonos cuyo vencimiento supera los 10 años, mientras que los pasivos de la pensión tienen una dispersión mayor y los pagos vencen mucho antes. Como resultado, incluso si la duración del fondo de bonos coincide con la duración del plan de pensión en su totalidad, existe el riesgo de incurrir en pérdidas en el estado de los fondos a medida que se observan cambios en la forma de la curva de rendimiento (p. ej. las tasas de corto plazo se desplazan a un ritmo diferente en comparación con las tasas de largo plazo). Al contar con una cartera completamente personalizada, el rendimiento de las inversiones de renta fija se puede alinear con las expectativas del patrocinador del plan. Recomendamos contar con dicha personalización incluso en el caso de las asignaciones de renta fija menores para permitir que la cartera de renta fija cumpla de una mejor manera con su objetivo de reducir el riesgo del estado de los fondos.

Generar una cartera personalizada en el presente con un nivel de asignación de renta fija menor sienta las bases para una cartera de cobertura sólida y bien estructurada cuando un plan esté más cerca de lograr la financiación total y la inversión predominante en cuanto a los activos de cobertura de pasivos.

Manejar el riesgo general del estado de los fondos de la pensión implica más que solamente el riesgo de la tasa de interés correspondiente a los pasivos del plan, ya que el riesgo de capital también podría ser un componente importante del riesgo del plan. En el caso de los patrocinadores de planes que pretenden mejorar el estado de los fondos, recomendamos asumir el riesgo en las áreas en las que puedas ser recompensado por un rendimiento superior en la parte de la cartera que busca obtener retornos. Por lo general recomendamos evitar el riesgo de la tasa de interés en la medida de lo posible al implementar las prácticas antes descritas.

Versión accesible de la tabla

 

  Años del 1 al 10 Años del 10 al 20 Años del 20 en adelante Total
Duración 1.8 años 4.7 años 7.0 años 13.5 años
Proporción 14% 35 % 51 % 100 %