Si quieres consolidar tus ahorros, un buen lugar para iniciar es la configuración de transferencias automáticas.[1] No tendrás que preocuparte por cuándo o cuánto transferir cada mes, y eliminar dichas barreras puede ser crucial si de otro modo terminarías atorado en una parálisis por análisis.

Aunque las aplicaciones y las soluciones automatizadas te pueden ayudar a ahorrar, la automatización en exceso te puede dejar con una sensación de logro infundada. Antes de configurar y olvidar, lo mejor es determinar cuánto necesitas ahorrar y planificar para realizar una verificación periódica a fin de asegurar que los sistemas automatizados que implementaste lograrán el objetivo.

Crea un plan y determina cuánto ahorrar

La automatización de transferencias diarias, semanales o mensuales te puede ahorrar tiempo y energía mental. Sin embargo, debes considerar detenidamente los pasos iniciales para determinar por qué quieres ahorrar y cuánto quieres ahorrar.

Por ejemplo, si tienes la meta de establecer un fondo para emergencias, deberás empezar por determinar cuáles son tus gastos mensuales necesarios (esta calculadora de fondos para emergencias te puede ayudar a calcular los resultados). Multiplica esos gastos por una cifra de entre 3 y 12 dependiendo de cuánto tiempo quieres que dure tu fondo para emergencias. Por lo general, cuanto más altos sean tus ingresos, más tiempo te llevará encontrar un trabajo nuevo donde obtengas un sueldo equivalente. Después, puedes configurar una transferencia automática para establecer gradualmente tu fondo para emergencias.

Otras metas, como liquidar deudas o ahorrar para la jubilación, pueden ser más complejas. Al liquidar deudas, debes tomar una decisión estratégica referente a cuáles son las deudas en las que te enfocarás. Algunas personas prefieren saldar primero las deudas que tienen los saldos más bajos, mientras que otras quieren enfocarse en las deudas que tienen las tasas de interés más altas.

En el caso de la jubilación, puedes iniciar estableciendo una meta con respecto a qué parte de tus ingresos quieres ahorrar e invertir. Quizás tengas la meta de ahorrar el 15 % de tus ingresos, pero inicias con 5 % o 10 % conforme a un plan para aumentar gradualmente tu tasa de contribución con el tiempo.

La automatización puede ayudarte a ejecutar tu plan

Las aplicaciones y los servicios automatizados se pueden presentar en varias formas. Algunos productos bancarios tienen características de automatización integradas y te permiten configurar transferencias regulares fácilmente de tu cuenta de cheques a tu cuenta de ahorros. También hay aplicaciones de ahorros y de inversión que pueden analizar tu cuenta bancaria y realizar transferencias tras haber determinado que te sobrará dinero después de pagar tus facturas.

Una vez que hayas implementado una meta y un plan, puedes usar estas herramientas de automatización para asegurar que estés avanzando. Por ejemplo, si tu meta es establecer tu cuenta de jubilación, puedes configurar contribuciones automáticas a tu plan 401(k) o transferencias automáticas a una cuenta individual para la jubilación (IRA).

 Pasar de no hacer contribución alguna a contribuir el 15 % de tus ingresos puede ser difícil. Sin embargo, podrías configurar un recordatorio en el calendario para aumentar un poco el monto de tu contribución cada 6 o 12 meses.

Los beneficios de automatizar tus ahorros

Poner los aspectos de tus ahorros y de tus inversiones en piloto automático puede beneficiarte de varias maneras:

  • Elimina un momento difícil: puede ser difícil transferir dinero a tus ahorros al saber que hay maneras en las que podrías gastarlo en el presente. La automatización te libera de la carga mental implicada en iniciar cada transferencia manualmente.
  • Ahorra tiempo: configurar ahorros automáticos también te ahorrará tiempo a futuro, pero debes asegurarte de planificar antes de configurar todo en piloto automático.
  • Facilita la elaboración de presupuestos: al automatizar tus ahorros, estarás ejecutando uno de los principios básicos de la elaboración de presupuestos y del establecimiento de patrimonio a largo plazo: págate a ti mismo primero. Tus ahorros se separan automáticamente y después haces un presupuesto de lo demás para las cosas que necesitas y las que quieres.
  • Establece buenos hábitos: ahorrar e invertir no surge de manera natural para muchas personas, aunque crear un plan y usar la automatización puede hacer que ahorrar forme parte de tu vida diaria.

Mantente involucrado y sigue siendo flexible

Asegúrate de iniciar con un plan bien pensado y reevalúalo sobre la marcha. Estas son algunas maneras para asegurar que no dejes que la automatización te desvíe del camino sin darte cuenta:

  • Haz una revisión (cuando menos) en forma trimestral: si llevas un presupuesto, puedes supervisar de cerca tu dinero durante todo el mes. De lo contrario, asegúrate de hacer una revisión cuando menos en forma trimestral para determinar si las transferencias y las contribuciones automáticas siguen coincidiendo con tus metas.
  • Aumenta las contribuciones cuando puedas: muchas metas financieras, las cuales incluyen el establecimiento de un fondo para emergencias, pueden llevar mucho tiempo para concretarse. Es importante iniciar lentamente y hacerse del hábito de ahorrar. Determina si puedes aumentar un poco el monto de tu contribución cada vez que hagas una revisión de tus finanzas. Probablemente no notarás si dejas de destinar un 1 % o un 2 % extra de tu dinero para gastos, pero con el tiempo puede hacer una gran diferencia para establecer tus ahorros.
  • Haz una reevaluación y ajústate a los cambios: tus metas y tus finanzas pueden cambiar tras presentarse eventos importantes. Reserva tiempo para reconsiderar tu plan después de experimentar la pérdida de un empleo, una promoción, el nacimiento de un hijo, un matrimonio u otro cambio significativo.

Sin importar con cuánto empieces, ahorrar dinero puede ser una parte importante del establecimiento de un futuro financiero sólido. Al tener metas en mente e implementar un plan, puedes usar la automatización para eliminar una parte del trabajo diario del proceso. Además, debes seguir siendo flexible si hay cambios en tus metas o en la situación. Ya implementaste la estructura básica, ahora puedes actualizar tus procesos rápidamente para mantener el rumbo.