Fue considerado un dispositivo de alta tecnología hace 50 años, pero ahora el cajero automático es una necesidad para las millones de personas que los utilizan en todo el mundo.

Si bien mucho ha cambiado sobre cómo y cuándo los consumidores hacen retiros y depósitos gracias al cajero automático, poco ha cambiado en lo que respecta a personajes nefastos que maquinan para aprovecharse de tu dinero obtenido con gran esfuerzo.

El sentido común exige que estés alerta en cualquier momento que manipules dinero. Ken Justice, vicepresidente sénior y ejecutivo de cajeros automáticos de PNC Bank, ofrece estos consejos para proteger tus cuentas y tu información personal cuando estés en un cajero automático.

1. Recuerda el “peligro de los desconocidos”: tiene un significado diferente para los adultos que para los niños, pero es un buen recordatorio para tener cuidado con los demás cuando se trata de ti y tu dinero. No aceptes la ayuda de ninguna persona que no conozcas cuando uses un cajero automático, incluidos los desconocidos que ofrecen ayuda porque dicen que el cajero automático no funciona. Podría ser un truco.

2. Menea los lectores de tarjetas: los cajeros automáticos son máquinas bien hechas sin piezas sueltas. Dale un buen tirón al dispositivo antes de insertar o deslizar la tarjeta. Los ladrones pueden instalar pequeños dispositivos electrónicos, llamados “clonadores”, sobre la ranura donde insertas o deslizas tu tarjeta. Si lo hacen, pueden robar detalles sobre tu cuenta e información personal. Si alguien ha manipulado un lector de tarjetas, puede parecer dañado (rayones, abolladuras o estrías), puede parecer que está adherido o pegado, o puede estar suelto. Si sospechas que fue manipulada, NO utilices la máquina e infórmalo inmediatamente.

3. Elige tus sitios: la ubicación es lo más importante. Selecciona cajeros automáticos en lugares públicos bien iluminados que estén libres de arbustos u otras obstrucciones.

4. Cubre el teclado: usa tu mano libre para esconder los números mientras introduces tu número de identificación personal (PIN). Además, párate directamente frente a la máquina para bloquear los ojos curiosos. Alguien puede estar observando, y puede estar o no cerca. Los estafadores inteligentes pueden usar cámaras diminutas o cámaras de teléfonos celulares para espiar a los que usan el cajero automático.

5. Minimiza el tiempo en el cajero automático: evita hurgar en tu monedero, billetera o bolsillos mientras estás parado en la máquina. Recuerda que el sentido común exige que estés alerta, no distraído. Llega a la máquina lo más preparado posible: comprobantes de depósito completados, cheques endosados “únicamente para depósito” y tarjeta en mano.

6. Protege tu PIN: la seguridad del cajero automático comienza con tu PIN. ¡Memorízalo! No lo anotes ni lo compartas. No te dejes engañar; nadie de una institución financiera, la policía o un comerciante deben pedirte tu PIN. Cuando se trata de tu PIN, se egoísta. Consérvalo para ti.

Conclusión: Está alerta al usar un cajero automático. Si notas algo sospechoso sobre el cajero automático o el área circundante, cancela la transacción y abandona el lugar. Denuncia el cajero automático al banco o a la policía local.

Observa tus estados de cuenta

La tecnología de clonación de tarjetas en el cajero automático está avanzando, y algunos clonadores son difíciles de detectar. Por las dudas, haz un seguimiento de los recibos y compáralos con tus estados de cuenta de tarjeta de crédito o bancarios.