Lo que quizás empezó como un acuerdo demasiado bueno que no podías dejar pasar podría terminar generándote gastos durante meses en el futuro. Costosos servicios de suscripción se podrían estar cargando en tu tarjeta de débito o de crédito mensualmente, y si no monitoreas de cerca tus cuentas, es posible que ni siquiera estés al tanto.

Es posible que el gancho se presente en forma de publicidad de un producto o servicio con un precio sorprendentemente bajo o la promesa de artículos por los que solo te cobrarán el envío. Sin embargo, una vez que has proporcionado la información de tu tarjeta de crédito y realizas el pedido, te has suscrito a un cargo mensual o recurrente que está oculto en la letra pequeña.

“Siempre es importante evaluar por qué algo parece demasiado bueno para ser verdad”, dice Joseph Grant, gerente del grupo de operaciones para la prevención del extravío de tarjetas del centro de atención al cliente de PNC. “En algunos casos, dichos comerciantes cuentan con el hecho de que los consumidores no ponen la suficiente atención a la letra pequeña o a sus estados de cuenta bancarios para saber que están acumulando cargos recurrentes basados en una compra por única ocasión”.

Grant dijo que el problema es más común de lo que las personas podrían esperar, ya que da lugar a miles de llamadas en las líneas telefónicas del centro de atención al cliente de PNC cada mes. Los clientes confundidos a menudo piden ayuda para identificar los cargos inesperados o para solicitar un reembolso de los cargos. A principios de 2020, Visa actualizó sus reglas para los comerciantes que ofrecen pruebas gratuitas o servicios de suscripción en un afán por brindar transparencia y control para los compradores.

“Esta práctica no es ilegal, solo que desafortunadamente a menudo es engañosa”, dijo Grant. “No hay garantía de que el dinero que se ha gastado se pueda recuperar, lo que puede provocar que se invierta mucho tiempo adicional en el proceso de disputa con un comerciante”.

Grant recomienda a los consumidores que estén atentos al hacer compras en línea, especialmente cuando algo tiene un precio que es demasiado bueno para ser verdad. Ten en cuenta estos consejos para ayudarte a evitar o identificar las pruebas que podrían convertirse en un cargo recurrente.

  • Investiga lo que estás comprando y de quién lo estás comprando. Realizar una búsqueda en Internet probablemente revelará si otros han tenido experiencias negativas con un comerciante.
  • Lee la letra pequeña en todas las compras antes de finalizar tu pedido. Debes estar alerta de cualquier frase referente a cargos recurrentes o cargos por suscripción.
  • Debes estar atento a las casillas de verificación que pueden inscribirte en servicios de suscripción o publicidad adicional.
  • Guarda todo correo electrónico que confirme tu pedido, ya que en este probablemente se mencionará cualquier fecha importante o cargos futuros.
  • Monitorea el correo electrónico en cuanto a cualquier notificación referente a un cargo futuro por suscripción.
  • Investiga las prácticas de servicio al cliente del comerciante. Si no es fácil ponerse en contacto con este, probablemente no es alguien con quien querrás hacer negocios.
  • Averigua qué tan fácil es cancelar un servicio o darse de baja antes de realizar una compra.
  • Monitorea tus estados de cuenta bancarios y revisa la actividad de la cuenta.
  • Contacta al comerciante pronto para ayudar a evitar cargos adicionales si descubres que has incurrido en un cargo relacionado con una suscripción y te gustaría cancelarla.

“La principal clave es simplemente ser consciente de las suscripciones que adquieres, así como de lo que sucede con el dinero de tu cuenta de manera habitual”, dijo Grant. “Cuando todas las partes son transparentes, se genera una mejor experiencia para todos”.