Muchos adultos sufren estrés con respecto a los asuntos financieros. De hecho, un estudio reciente indicó que el 53 por ciento de los millennials han llorado en el último año debido a problemas financieros[1]. Los datos de la Asociación Estadounidense de Psicología (American Psychological Association, APA) recabados a finales de 2022 también han indicado que muchos estadounidenses han reportado estrés financiero creciente durante el último año[2].

Aunque algunos consideran que sus finanzas están bien, el sentimiento que prevalece entre muchas personas es que la combinación de los préstamos estudiantiles, la deuda de las tarjetas de crédito, la hipoteca y los pagos de alquiler, y los pagos de automóvil están demostrando ser factores de estrés agudos, en particular durante un periodo de inflación y volatilidad económica. Aunque el dinero puede ser un factor de estrés común, existen maneras para ayudar a reducir la carga emocional que se deriva de las dificultades financieras.

La dificultad financiera que afecta nuestro bienestar

Los obstáculos financieros pueden afectar su mentalidad de una forma significativa. En los Estados Unidos, un impactante 90 por ciento de quienes respondieron una encuesta mencionaron que sufren estrés relacionado con las finanzas. La inflación ha disminuido el poder adquisitivo de los consumidores, y la volatilidad del mercado de valores provoca que las personas se preocupen por sus inversiones y su planificación para la jubilación. A pesar de que los salarios reales han tenido un incremento en varios sectores en el 2022, no han aumentado lo suficiente para seguir el ritmo de las condiciones económicas[3].

La proyección financiera incierta puede generar preocupaciones entre las personas que ahorran, las que gastan y las que están liquidando deudas; sin embargo, existen maneras para manejar los temores financieros, tales como el cambio de mentalidad ante los movimientos financieros.

Manejar el estrés al enfrentar las deudas

Las deudas son uno de los principales motivos del estrés relacionado con el dinero. Esto es particularmente cierto en el caso de las personas que solo se pueden permitir hacer pagos pequeños, o para quienes la liquidación de las deudas es un proceso que lleva años. Las deudas de préstamos estudiantiles son particularmente complicadas para muchas personas que, años después de haberse graduado, siguen liquidando los préstamos que solicitaron. Incluso las personas que tienen menos deudas aún pueden sufrir el dolor financiero que acompaña a la liquidación de un saldo y el interés.

Hay varias maneras en las que usted puede manejar el estrés que acompaña al hecho de enfrentar los problemas relacionados con el dinero. El primer paso implica comprender su situación a cabalidad. Después, considere su red de apoyo: puede recurrir al apoyo de un profesional financiero o contador que le ayude a crear un presupuesto viable y un plan de pagos. Por último, asegúrese de celebrar las pequeñas victorias. Liquidar las deudas es una tarea monumental, por lo que puede resultar difícil reconocer el progreso gradual.

Sin importar cuántas deudas pueda tener, es importante ponerlas en contexto. Una mano firme le puede ayudar: trabaje en un plan que le ayude a liquidar las deudas eficazmente y cíñase a este plan. Un profesional financiero puede ayudar a explicarle sus opciones. Con frecuencia es mejor enfrentar los temores como este y tener un plan para resolverlos. La concientización ayuda mucho en este sentido a medida que avance a través de sus dificultades financieras.

La concientización en torno al dinero puede reducir el estrés

Es importante implementar un plan financiero, no solo para ayudarle a enfrentar las deudas y los gastos de una mejor manera, sino también para reducir su estrés gracias a que ha implementado un plan. Conocer sus tácticas puede ayudar a brindarle tranquilidad, incluso si aún se encuentra a la mitad de liquidar sus deudas o apenas empieza a establecer una cuenta de ahorros para emergencias.

Cuanto más sea capaz de pensar a largo plazo con respecto al dinero, mejor será su posición para enfocarse en su patrimonio neto. Usted estará menos estresado con respecto a la vida diaria si tiene la capacidad de implementar un plan que maneje sus gastos habituales. Si usted puede planificar las metas de ahorro a largo plazo, también puede minimizar su estrés diario.

Hábitos de finanzas conscientes

El dinero puede ser un factor de estrés importante en la vida de muchas personas. Equilibrar un presupuesto, liquidar las deudas y ahorrar para el futuro son tres metas que pueden parecer contrapuestas entre sí. La verdad es que se pueden equilibrar las tres con confianza, siempre y cuando se implemente el plan adecuado. Adoptar un enfoque consciente y mesurado con respecto a los ahorros, el gasto y la inversión puede ayudarle a sentirse cómodo al saber que ha implementado un plan para manejar su presente y futuro financiero. Hablar con un profesional de banca puede ayudar a ponerlo en el camino correcto, y quizás también a que se sienta tranquilo.