Los jubilados son elegibles para solicitar beneficios a los 62 años de edad, pero el periodo en el que lo hacen puede afectar drásticamente el monto de sus beneficios.

Esto deja a muchos pensando, “¿cuándo es el momento más oportuno para solicitar los beneficios del Seguro Social?”.

La verdad es que no hay una única respuesta para todos. Debe comparar las opciones disponibles con su conjunto particular de necesidades financieras y circunstancias.

¿Cuál es la buena noticia? Informarse y buscar orientación profesional puede ayudarle a tomar decisiones informadas con las que se sienta seguro.

Cómo identificar los beneficios esperados

La Administración del Seguro Social (SSA, por sus siglas en inglés) proporciona estados de cuenta detallados de sus beneficios de jubilación mensuales proyectados si fuera a solicitarlos a la edad de jubilación establecida (FRA), a los 62 años o a los 70 años. Los estados de cuenta también incluyen otros beneficios estimados, su registro de ingresos y factores clave adicionales.

Cómo se calculan sus beneficios

Sus beneficios se basan en sus 35 años de ingresos más altos, ajustados para justificar cambios en salarios desde el año en que se obtuvieron. La SSA luego aplica una fórmula para que esas cifras alcancen su monto de beneficios específico a la FRA, al que también se le conoce como su monto de seguro primario (PIA, por sus siglas en inglés). 

Ventajas y desventajas del momento en el que solicite sus beneficios

Existen tres opciones con respecto a cuándo solicitar sus beneficios: solicitarlos anticipadamente, solicitarlos cuando cumpla la edad de jubilación oficial o solicitarlos a los 70 años de edad. Cada opción conlleva sus propios beneficios y riesgos. Un concepto importante que debe comprender antes de evaluar cuál es el momento oportuno para solicitar sus beneficios del Seguro Social es su punto de equilibrio. El punto de equilibrio es el punto en el que el monto del beneficio que ha aumentado debido a la espera para solicitar los beneficios del Seguro Social equivale al monto acumulado que se cobra al solicitar dichos beneficios anticipadamente. Para la mayoría de las personas, dicha intersección ocurre cuando faltan pocos años para cumplir los 80 o cuando han pasados pocos años de haberlos cumplido.

Solicitar los beneficios a los 62 años de edad

Puede empezar a solicitar sus beneficios incluso a los 62 años de edad, aunque estos se reducirán de forma permanente. Por ejemplo, para quienes nacieron entre 1943 y 1954, si solicitan beneficios a los 62 años de edad, verán una reducción de aproximadamente el 25 % en sus beneficios, en comparación con si solicitan sus beneficios a la edad de jubilación oficial de 66.

Si solicita sus beneficios en la primera oportunidad de elegibilidad, puede perderse beneficios potenciales considerables en comparación con esperar hasta cumplir la edad de jubilación oficial o incluso a cumplir 70 años. Sin embargo, existen casos en los que solicitar los beneficios anticipadamente es la opción más lógica en términos financieros o personales:

  • Su salud está deteriorada: la ventaja a corto plazo de recibir los beneficios del Seguro Social anticipadamente puede valer la pena, en particular si no está seguro si vivirá más allá de su punto de equilibrio.
  • Maximizará los beneficios con un cónyuge: si está casado, programar la solicitud de beneficios del Seguro Social con su cónyuge puede ayudarle a maximizar un beneficio a largo plazo al mismo tiempo que satisface las necesidades presentes de flujo de caja. Por ejemplo, el cónyuge con menores ingresos puede solicitar los beneficios anticipadamente, mientras que el cónyuge con mayores ingresos retrasa su solicitud, conservando así el beneficio futuro máximo del cónyuge con mayores ingresos, mientras reciben los beneficios del cónyuge con menores ingresos anticipadamente.
  • No quiere seguir trabajando: para algunas personas, los beneficios de estilo de vida que conlleva el hecho de abandonar la fuerza laboral pueden superar el mayor beneficio financiero futuro del Seguro Social.
  • Quiere conservar activos que tienen potencial de crecimiento: si no está preparado para hacer uso de sus ahorros para la jubilación, o si quiere dar a su cartera un poco más de tiempo para que aumente, solicitar los beneficios del Seguro Social anticipadamente podría darle un poco más de tiempo.
  • No puede permitirse no hacerlo: para algunas personas, solicitar los beneficios del Seguro Social anticipadamente es necesario para cubrir los gastos básicos diarios.

Solicitar los beneficios al cumplir la edad de jubilación oficial 

La principal ventaja de esperar hasta cumplir la edad de jubilación oficial es que tiene derecho a recibir el 100 % de sus beneficios, sin la posibilidad de reducciones con el tiempo. Su edad de jubilación establecida para efectos del Seguro Social se basa en el año en el que nació.

Año de nacimiento

FRA

1943-1954

66

1955-1959

66 + 2 meses por cada año después de 1954 hasta 1960

1960 y años posteriores

67


Retrasar su solicitud hasta los 70 años de edad

Puede retrasar la solicitud de sus beneficios hasta la edad máxima de 70 años. En este caso la principal ventaja es el aumento de sus beneficios durante el resto de su vida. Por ejemplo, para quienes nacieron entre 1943 y 1954, solicitar beneficios a los 70 años de edad dará como resultado un 8 % adicional de crédito de jubilación posterior cada año o, en total, un aumento del 32 % en sus beneficios, en comparación a solicitar los beneficios a la edad de jubilación oficial de 66 años.

Además de la posibilidad de un mayor beneficio anual, retrasar su solicitud de beneficios del Seguro Social puede dar lugar a un mayor beneficio a largo plazo con el tiempo. Retrasar una solicitud de beneficios del Seguro Social puede resultar lógico si:

  • Tiene otras formas de ingresos de las que puede disponer: puede realizar beneficios fiscales al recurrir a otras fuentes de ingresos, como las cuentas de jubilación o de ahorros, lo que retrasa su necesidad de recibir ingresos del Seguro Social.
  • Sigue trabajando: trabajar después de cumplir la edad de jubilación oficial puede permitirle cubrir los gastos de estilo de vida al mismo tiempo que aumenta sus beneficios futuros.
  • O le preocupan los beneficios conyugales o de supervivencia: cuando retrasa la solicitud de beneficios del Seguro Social, es posible que su cónyuge también tenga derechos a recibir beneficios conyugales más elevados o beneficios de supervivencia. 

Además, los ajustes de costos de vida (COLA, por sus siglas en inglés) comenzarán a darle un impulso a sus beneficios potenciales a los 62 años de edad, y ese impulso continuará aumentando cada año que retrase la solicitud de sus beneficios. 

Es importante observar que los cambiantes montos de beneficios no tienen la finalidad de sancionar o premiar. Los actuarios de la SSA intentan establecer beneficios de tal manera que si vive la edad de vida esperada, reciba aproximadamente la misma cantidad del programa ya sea que comience a recibir sus beneficios a los 62 años, a los 70, o a cualquier edad intermedia en ese rango.

Impacto en los impuestos y en Medicare

Mientras determina su estrategia para solicitar beneficios del Seguro Social, es importante que tenga en cuenta cómo esos ingresos afectarán sus impuestos y costos de seguro médico. En general, sus ingresos del Seguro Social dependerán fiscalmente de sus “ingresos combinados”, los cuales incluyen los ingresos brutos, los intereses devengados no gravables y la mitad de sus ingresos del Seguro Social. Dependiendo de dichos ingresos combinados, se cobrarán impuestos sobre sus ingresos del Seguro Social de la siguiente manera:

  • 0 % si sus ingresos combinados ascienden a $25,000 o menos ($32,000 si está casado y presenta declaraciones conjuntas);
  • Hasta el 50 % si sus ingresos son de entre $25,000 y $34,000 (o entre $32,000 y $44,000 si presenta declaraciones conjuntas).
  • Hasta el 85 % si sus ingresos combinados ascienden a más de $34,000 ($44,000 si presenta declaraciones conjuntas).

Sus primas de Medicare pueden verse afectadas de manera similar en función de sus ingresos, incluidos los ingresos del Seguro Social, sobre la base del Monto de Ajuste Mensual Relacionado con los Ingresos (Income-Related Monthly Adjustment Amount, IRMAA). Ese recargo se calcula usando sus ingresos brutos ajustados modificados (MAGI) de los dos años anteriores. Aunque el recargo afectará principalmente a quienes tienen ingresos elevados en la jubilación, programar su solicitud de beneficios del Seguro Social teniendo en cuenta sus demás inversiones es un aspecto importante a considerar para minimizar el impacto en sus primas de Medicare.

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