Uno de los aspectos más importantes a considerar al establecer un fideicomiso es determinar dónde se constituirá. La sede del fideicomiso, es decir, dónde se administra el fideicomiso, probablemente determinará cómo se cobrarán los impuestos sobre el mismo, cómo se distribuirán los beneficios, las protecciones de privacidad e incluso cuánto tiempo estará activo el fideicomiso.

Un error común es pensar que su lugar de residencia determinará la jurisdicción del fideicomiso. Sin embargo, no necesariamente es así, ya que una gran variedad de factores pueden determinar la jurisdicción de un fideicomiso, incluido el estado de residencia del otorgante, la ubicación de los activos dentro del fideicomiso, dónde se encuentran los beneficiarios o el estado en el que se creó el fideicomiso inicialmente.

“La jurisdicción de un fideicomiso no se determina automáticamente por criterios geográficos; se trata de una decisión muy importante que probablemente afecte la manera en que se estructure su fideicomiso, cómo se cobren impuestos sobre el mismo y la forma en que se distribuirán los activos”, dijo Josh Ott, gerente del mercado fiduciario de PNC Delaware Trust Company. “Las metas que tenga para el fideicomiso y el tipo de fideicomiso que esté contemplando serán los factores clave para determinar la jurisdicción adecuada”.

Cómo la jurisdicción afecta al fideicomiso

Establecer un fideicomiso implica tiempo y la toma de decisiones. Entre las numerosas decisiones que deberá tomar se encuentra el tipo de fideicomiso que le conviene, quién lo administrará, quiénes serán los beneficiarios del fideicomiso y qué tipo de activos lo compondrán. La mayoría de esas decisiones se aplicarán independientemente de dónde se administre su fideicomiso, aunque eso no significa que la jurisdicción del fideicomiso no sea un aspecto importante a considerar, pues de hecho es uno de los aspectos más importantes.

El lugar donde esté constituido su fideicomiso determinará la ley estatal a la cual estará sujeto. Si bien se han realizado esfuerzos para estandarizar la legislación en cuestiones de fideicomisos entre los distintos estados, el Código Uniforme de Fideicomisos, una ley modelo para la administración de fideicomisos, se ha promulgado parcialmente en 36 estados, aunque las disposiciones varían ampliamente en todo el país. Dichas leyes dictarán desde el tipo de activos que pueden incluirse en el fideicomiso, cómo se cobrarán impuestos al momento de su distribución, cómo realizar ajustes conforme a las necesidades cambiantes y el período que su fideicomiso puede permanecer activo.

Sus metas de planificación patrimonial individuales determinarán cuál es el estado más favorable para administrar su fideicomiso, y es importante tomar esta decisión en conjunto con sus asesores financieros, fiscales y legales. Algunos estados ofrecen beneficios específicos para la administración de fideicomisos que valen la pena considerar.

Tradición de fideicomisos de Delaware

El primer estado en ratificar la Constitución de los Estados Unidos es con frecuencia el que viene a la mente al momento de establecer un fideicomiso. La estructura fiscal de Delaware, así como su reputación y su historial de favorecer la administración de fideicomisos lo ha convertido en un destino popular para establecer una variedad de estructuras de fideicomisos diferentes. Algunas de las ventajas que se citan normalmente
al establecer un fideicomiso en Delaware incluyen las siguientes:

  • Favorable en cuestiones de impuestos: la estructura fiscal de Delaware puede permitir que los beneficiarios de fideicomisos que no son residentes tengan la posibilidad de evitar o reducir significativamente los impuestos estatales aplicables a los ingresos que genere el fideicomiso. Además, los fideicomisos tienen la posibilidad de evitar el impuesto de sucesión y el impuesto de transferencia transgeneracional
    entre generaciones debido a que Delaware permite los fideicomisos perpetuos.
  • Privacidad: a menudo la documentación del fideicomiso se mantiene fuera de los registros públicos a través de estructuras de fideicomiso silencioso que permiten limitar su divulgación, incluso a los beneficiarios bajo ciertas circunstancias.
  • Flexibilidad: bajo ciertas circunstancias, la ley de Delaware permite la transferencia de activos entre fideicomisos (decantación), lo que incluye fideicomisos con términos distintos del fideicomiso original.
  • Fideicomisos perpetuos: Delaware permite la creación de estructuras de fideicomiso de dinastía que conservan activos en el fideicomiso a perpetuidad, lo que posiblemente les permite evitar el impuesto de sucesión y el impuesto de transferencia transgeneracional
    al mismo tiempo que genera rendimientos compuestos durante el plazo del fideicomiso.
  • Protección de activos: los activos que se conservan en un fideicomiso conforme a la ley de Delaware pueden estar protegidos en distintos grados, incluso mediante cláusulas de restricción de disposición (spendthrift), las cuales brindan protección contra el posible uso indebido de los fondos
    por parte de los beneficiarios y otros.
  • El Tribunal de Equidad de Delaware: al formar parte del sistema judicial constitucional de Delaware, el Tribunal de Equidad es reconocido por su experiencia en jurisprudencia en la administración de fideicomisos. El tribunal es uno de los principales contribuidores al liderazgo de Delaware en litigios corporativos y sucesorios y se lo considera
    sede de más de dos terceras partes de las empresas Fortune 500.

La historia aporta experiencia

Sin duda, existen otros estados que se conocen como jurisdicciones que admiten fideicomisos. La historia establecida y la coyuntura legislativa favorable de Delaware hacen que el estado sea una jurisdicción favorable, aunque las decisiones sobre dónde establecer y administrar un fideicomiso siempre se deben tomar teniendo en cuenta la orientación de asesores financieros, legales y fiscales.

“En varios casos, las jurisdicciones más nuevas aún no poseen precisamente el marco ni la estructura que Delaware tiene para gestionar los servicios complementarios que conlleva un fideicomiso”, dijo Kirsten Cataldi, asesora fiduciaria sénior de PNC Delaware Trust Company. “Aquí podemos proporcionar una gama completa de servicios complementarios, como impuestos, administración de inversiones y custodia de activos, los cuales, al ser desglosados, pueden aumentar significativamente el costo del proceso”.

Hay varias preguntas que deberá considerar al establecer un fideicomiso. Para muchos, las más evidentes girarán en torno a quiénes se distribuirán sus bienes y cómo se distribuirán. Es muy posible que las respuestas a esas preguntas dependan del lugar en el que se constituya su fideicomiso. Sus asesores financieros, legales y fiscales pueden ayudar a determinar qué jurisdicción es la más favorable según sus necesidades particulares de planificación patrimonial.