Contribuir al bienestar de otros y al fortalecimiento de su comunidad pueden ser maneras importantes y gratificantes de utilizar sus recursos. Muchas personas tienen la tradición de hacer donaciones benéficas durante las fiestas. Sin embargo, incorporar la donación en su plan financiero semanal o mensual le permite difundir alegría durante todo el año.  

Integre la cultura de dar en su planificación financiera

Si desea dar prioridad a sus intenciones benéficas, un primer paso recomendable sería considerar sus contribuciones caritativas como una prioridad principal al elaborar su presupuesto. Esto es análogo a la práctica de “pagarse a sí mismo primero”, donde las contribuciones para el retiro o el ahorro se deducen directamente de su salario. O la forma en que los fieles de entidades religiosas contribuyen con un porcentaje de su salario (conocido como diezmo).

Usted decide qué cantidad desea aportar, ya sea un monto fijo o un porcentaje de sus ingresos. La cantidad está sujeta a cambios según requiera ajustar su presupuesto

Una vez que determine lo que funciona, podría disponer que los fondos se depositen directamente en una cuenta que haya establecido para donaciones a entidades benéficas. O quizás usted lleva un registro de su fondo de donaciones utilizando un software de presupuesto o una hoja de cálculo.

Si sus recursos financieros no le permiten contribuir en la medida que desea, podría considerar la posibilidad de aportar su tiempo y esfuerzo a través del voluntariado. Cuando su presupuesto le permita cierta flexibilidad, podría destinar una parte a un fondo de donaciones. Luego, “recompénsese” con una cantidad del fondo por cada hora que dedique al voluntariado.

Considere las causas específicas y las personas a las que desea apoyar

También deberá decidir a quién desea apoyar con su dinero o tiempo. Podría haber organizaciones individuales que usted ya conoce y prefiere, como un banco de alimentos local. En el caso de objetivos más amplios, como mejorar el acceso a la educación, se recomienda realizar una investigación detallada para identificar qué entidades ofrecen el mejor apoyo a ese propósito. 

Una vez que haya seleccionado a los beneficiarios, considere la posibilidad de inscribirse para realizar contribuciones mensuales automáticas o turnos regulares de voluntariado. La organización podría beneficiarse de contar con un flujo constante de apoyo en lugar de grandes contribuciones una o dos veces al año.

Asimismo, podría investigar si su lugar de trabajo ofrece un programa de igualación de donativos benéficos. Si es así, puede aumentar su impacto solicitando a la empresa que también contribuya. Sin embargo, algunas empresas restringen las clases de entidades benéficas elegibles y establecen un monto máximo de igualación de donaciones. 

Además, podría considerar destinar una parte de los recursos de su fondo filantrópico para imprevistos o emergencias. Una vez establecida su cuenta, tendrá la libertad de acceder a sus recursos sin restricciones, ya sea para contribuir a una campaña de GoFundMe o para brindar apoyo económico a familiares o amigos que lo necesiten. Si al finalizar el año cuenta con un fondo remanente, podría considerar aportarlo a campañas de donación de abrigos y juguetes. 

Investigue las organizaciones benéficas antes de realizar donaciones

Sería prudente realizar una investigación detallada sobre las entidades a las cuales piensa ofrecer su apoyo, para verificar que exista una correspondencia entre sus objetivos y la eficiencia con la que dichas organizaciones utilizarán sus recursos financieros o su tiempo. Puede consultar sitios como Charity Navigator, CharityWatchGuideStar para ver calificaciones y análisis de diversas organizaciones benéficas. 

Investigar a las organizaciones puede ser especialmente importante si se presenta un incidente de gran cobertura en los medios. Lamentablemente, después de eventos significativos que motivan la solidaridad, como los desastres naturales, es común que estafadores establezcan organizaciones benéficas falsas.

Entienda las implicaciones fiscales

Aunque los beneficios fiscales no suelen ser la razón principal por la que la gente hace donativos, es importante entender cómo estas donaciones a entidades benéficas pueden afectar sus obligaciones tributarias. 

Las donaciones benéficas pueden ser deducibles de impuestos si se realizan a una organización exenta de impuestos bajo la clasificación 501(c)(3). Sin embargo, una donación a una amistad o contribución a una campaña individual de GoFundMe generalmente no es deducible de impuestos. Además, no es posible deducir de sus impuestos las horas dedicadas al voluntariado. Pero podría deducir gastos relacionados, como los costos de viaje o transporte. 

A su vez es importante entender que la mayoría de las donaciones benéficas se clasifican como deducciones. Según la organización Tax Foundation, la mayoría de los contribuyentes, alrededor del 86.3 por ciento en 2019, optaron por la deducción estándar. Por lo tanto, es posible que las donaciones deducibles de impuestos no afecten su declaración fiscal.

Durante el año fiscal 2021, se estableció una disposición especial que autorizó la deducción directa de hasta $300 en donativos en efectivo que cumplieran con los requisitos, o hasta $600 para contribuyentes casados que presentaran una declaración conjunta. Lo que significa que puede obtener beneficios aunque opte por la deducción estándar. Sin embargo, saber si donaciones adicionales (o cualquier donación en otros años) afectarán sus impuestos puede ayudarle a contribuir de forma más eficiente. 

Por ejemplo, si usted no detalla sus deducciones, podría considerar consultar con las entidades benéficas que desea apoyar si están afiliadas a una organización 501(c)(4). Estas organizaciones también están exentas de impuestos, pero tienen menos restricciones en sus actividades de cabildeo y se les permite respaldar a candidatos políticos, aunque las donaciones no son deducibles de impuestos para el donante. 

Las donaciones a organizaciones 501(c)(4) no son deducibles de impuestos. Sin embargo, si de todas formas no va a beneficiarse de una deducción fiscal, podría considerar apoyar el sector de la organización que quizás no reciba tanto apoyo financiero de otras fuentes. 

Reevalúe su plan cada año

Establezca un tiempo cada año para revisar su plan de donaciones y asegurarse de que aún se alinee con sus valores y presupuesto. Podría descubrir que está en condiciones de incrementar su contribución monetaria o dedicar más tiempo al voluntariado, o que necesita reducir un poco sus aportaciones para alcanzar sus otras metas. Podría también integrar la revisión en una verificación financiera anual. O, si es algo que no ha hecho anteriormente, inicie la nueva práctica de revisarlos juntos al menos una vez al año. 

Para una mirada profunda:
Elaboración de presupuestos