Uno de los componentes más importantes de la planificación testamentaria es determinar quién heredará sus activos. Es una decisión difícil. ¿En quién puede confiar para que conserve el patrimonio familiar? ¿Quién es el que más lo necesita? ¿Quién se alinea mejor con los valores de la familia?

Si bien estas son preguntas importantes, quizás la pregunta más decisiva es “¿quién está listo para recibir una herencia?” Aunque puede parecer una pregunta sin sentido (¿qué persona diría que no está lista para recibir dinero?), no es poco común que los herederos tengan dificultades con la riqueza recién adquirida. 

El concepto es la base del proverbio con frecuencia repetido, “abuelo comerciante, padre noble e hijo pordiosero”, que hace referencia a la dificultad para mantener el patrimonio familiar desde la generación que lo obtuvo hasta las generaciones subsiguientes que lo heredan.

“Si bien el dicho en sí es una exageración, es cierto que las familias pueden tener dificultades para conservar el patrimonio de una generación a otra”, dijo Judy Raffa, director de Soluciones de asesoramiento estratégico de PNC Private Bank. “Heredar el patrimonio no es simplemente un lujo. Es una responsabilidad que para algunos viene acompañada de mucha presión e incertidumbre”.

Sin embargo, hay medidas que puede tomar para mitigar la incertidumbre, y ayudar a sus herederos a prepararse para lo que heredarán.

1. Hablar sobre el patrimonio familiar

La comunicación quizás es el aspecto más importante de la planificación patrimonial, aunque es el más ignorado. Muchos herederos quizás no tengan conocimiento pleno de la situación financiera de la familia o de que están listos para heredar activos considerables. Sostener conversaciones sobre el patrimonio también puede ser difícil tanto para los padres como para sus futuros herederos. Puede resultar incómodo para los padres hablar sobre el alcance completo del patrimonio de la familia, así como puede ser difícil para los herederos pensar en la responsabilidad de administrar el dinero al no tener a sus padres.

Aun así, el hecho de que sea lo más transparente posible y que los herederos se involucren lo más que puedan en el proceso de planificación testamentaria de la familia, en la toma de decisiones financieras y en la creación de la misión familiar, puede marcar una diferencia significativa en la seguridad y la preparación más adelante. Las conversaciones francas sobre el patrimonio familiar pueden identificar brechas con respecto a la comprensión y la educación que se pueden ajustar antes de que se realice la transferencia de una herencia considerable. Además, involucrar a los futuros herederos en las conversaciones que se sostengan con los asesores financieros y fiscales familiares, cuando proceda, puede ayudar a generar seguridad en cuanto a buscar orientación futura en dichas relaciones de confianza.

2. Hablar de los valores familiares y las expectativas

Una fuente común de confusión o temor de las generaciones de mayor edad es que el hecho de legar un patrimonio significativo desincentivará el trabajo duro entre los herederos o que el dinero se utilizará de una manera que no coincida con el sistema de valores familiares. Eso puede derivarse de la falta de una dirección clara o de la expectativa que les deje a sus herederos. Esto se agrava por el hecho de que una vez que haya legado el patrimonio, es mucho más difícil influir en cómo se utiliza.

Una vez más, la comunicación es fundamental para asegurar que se dé el uso previsto al patrimonio heredado, si es que existe tal uso previsto. ¿La educación superior es una de las metas de su familia? ¿Existe la expectativa de que sus herederos continúen trabajando o logren el éxito como emprendedores? Quizás las donaciones a entidades benéficas sean una parte importante del legado familiar. Independientemente de la expectativa que tenga para su patrimonio familiar, es importante que sea transparente con respecto a sus deseos.

“Puede parecer muy severo otorgar una donación y ordenar cómo debe utilizarse, aunque esa dirección puede dar una enorme seguridad tanto al benefactor como al heredero”, dijo Raffa. “Ser claro con respecto a las expectativas en torno al legado y los valores familiares puede ayudar a los herederos a tomar mejores decisiones en cuanto al patrimonio heredado”.

3. Ser sincero con respecto al “quién” y al “qué”

Uno de los principales beneficios de un plan testamentario integral es la dirección clara que este proporciona con respecto a cómo se deben distribuir los activos y a quién se deben distribuir. Sin embargo, la dirección clara para el sistema jurídico y el financiero tal vez no se explique a los herederos, en particular si los detalles de la herencia no se divulgan sino hasta su fallecimiento.

Aunque a menudo consideramos que la herencia es una distribución equitativa de patrimonio u otros activos, a menudo no sucede que todos los herederos reciban una herencia equitativa. Las necesidades individuales, la preparación para recibir una herencia, la edad u otros factores únicos, por ejemplo, la participación en una empresa familiar, pueden dirigir las decisiones de distribución de activos que otorguen más a un heredero a que a otro, lo que puede dar lugar a conflictos familiares e incluso disputas legales. Prepare a sus herederos para lo que puedan planear heredar, así como cualquier detalle correspondiente en torno a su toma de decisiones antes de donar su patrimonio. Esto puede permitir que los herederos hagan preguntas y puede ayudarle a disminuir el conflicto y, de ser necesario, hacer ajustes a su plan testamentario.

4. Heredar de forma eficiente

Piense detenidamente en las necesidades específicas que tienen sus herederos o en las expectativas que usted tiene con respecto a cómo se utilizará la herencia al momento de determinar cómo legará su patrimonio. Ciertos activos pueden ser de difícil acceso, pueden generar una carga tributaria o pueden poner al heredero en una categoría impositiva más alta por completo.

Si sus herederos necesitan contar con acceso conveniente al dinero, los activos como el efectivo, las cuentas money market o las cuentas de corretaje gravables pueden ser una opción inteligente debido a su liquidez. Los activos como las acciones pueden conceder ventajas fiscales debido a la base revalorizada que reciben cuando se heredan, lo que básicamente permite que los herederos reinicien el período de las ganancias de capital. Sin embargo, otros activos como las cuentas 401(k) o las pólizas de seguro de vida que tienen beneficiarios designados, se pueden legar sin llevar a cabo el proceso de validación testamentaria, lo que ayuda a los herederos a acceder a su herencia de una forma más eficiente y privada.

Independientemente de cuales sean las necesidades financieras específicas de sus herederos, un asesor puede ayudarle a determinar cómo estructurar su plan testamentario para satisfacer dichas necesidades.

5. Considerar un fideicomiso

Una gran parte del trabajo que implica preparar a los herederos para recibir una herencia gira en torno a la conversación franca, la transparencia y la educación, pero establecer un fideicomiso es una medida táctica que usted puede tomar para ayudar a sus herederos a recibir y administrar su herencia de una forma coherente con lo que usted desea. Un fideicomiso puede incluir condiciones específicas con respecto a cómo y cuándo los herederos pueden acceder a su herencia o estipular cómo se deben utilizar los fondos de la misma. Los fideicomisos además tienen ventajas fiscales y administrativas que pueden reducir la carga para sus herederos, evitar la validación testamentaria y proteger la privacidad durante el proceso de distribución de activos.

Los fideicomisos también son flexibles ante las circunstancias cambiantes de la vida, lo que le permite realizar su modificación a medida que las prioridades de la familia evolucionan o se realizan cambios de beneficiarios.

“Los fideicomisos pueden ser una parte muy eficaz de su plan testamentario”, dijo Raffa. “Ayudan a iniciar la transferencia de patrimonio a la siguiente generación durante su vida, al mismo tiempo que ayudan a proteger sus deseos y su legado tras su fallecimiento”.

Aunque recibir una herencia puede brindar seguridad financiera, esta puede incluir presión e incertidumbre, en particular si los herederos no están preparados para recibirla. Tener una conversación con su asesor puede ayudarle a evaluar la preparación de sus posibles herederos y cualquier posible brecha a medida que establece su plan testamentario.