La organización sin fines de lucro A tiene una larga trayectoria de programas exitosos, un impacto basado en datos y un sólido liderazgo cuando, aparentemente de la nada, recibe una donación de efectivo equivalente al tamaño de sus ingresos anuales. La organización B, la cual tiene un sólido programa de marketing que ha producido una gran base de campañas anuales, recibe una carta de la herencia de un fiel donante que realiza contribuciones mensuales. Sin embargo, en esta ocasión la contribución es un legado de caridad 1,000 veces mayor. En el entorno de las organizaciones sin fines de lucro, estos dos ejemplos de megadonaciones se conocen como “beneficios inesperados”, pues se definen como una donación inesperada por una cantidad transformadora de tamaño considerable. Aunque puede resultar tentador asignar la mayor parte de los fondos recién adquiridos para cubrir necesidades inmediatas, si se implementa una planificación estratégica adecuada, las donaciones de beneficios inesperados pueden servir como una excelente herramienta para crear sostenibilidad financiera para su organización.

El ascenso de las megadonaciones

Las megadonaciones se han vuelto cada vez más comunes en años recientes. En 2010, Warren Buffet y Bill y Melinda French Gates establecieron el Giving Pledge (“El compromiso de donación”), que representa una invitación abierta para que las personas más ricas del mundo se comprometan a donar la mayor parte de su riqueza a causas filantrópicas, ya sea en vida o a través de un testamento. En 2024, había casi 250 otorgantes de 30 países alrededor del mundo.1 Una signataria notable, la filántropa MacKenzie Scott, surgió como lideresa de la “filantropía basada en la confianza”, en la cual su fundación otorga subvenciones sin restricciones, lo que permite a los beneficios usar la donación según lo consideren conveniente. A la fecha, la fundación ha entregado más de $19 mil millones a más de 2,450 organizaciones sin fines de lucro.2

El efecto MacKenzie Scott

A fin de evaluar el impacto de las donaciones de Scott, The Center for Effective Philanthropy llevó a cabo un estudio de tres años sobre los efectos transformadores que experimentan los beneficiarios. Según el informe final publicado en febrero de 2025, casi el 90 % de los directivos de organizaciones sin fines de lucro encuestados indicaron que la subvención había fortalecido la sostenibilidad financiera a largo plazo de su organización de forma moderada o significativa. Las organizaciones informaron que gastaron los fondos en una amplia variedad de categorías, que incluyen la expansión de programas, la remuneración y la estructura del personal, la liquidación de deudas y el establecimiento de una dotación. Casi la mitad informaron que la subvención se utilizó para reforzar sus reservas o incrementar sus activos de inversión. Notablemente, el 70 % de los directivos mencionaron que su mayor preocupación, es decir, la pérdida de financiadores debido a la salud financiera mejorada de la organización, no se materializó.3

Análisis de la estructura de capital

Los programas, las operaciones y el financiamiento son categorías fundamentales que debe considerar al asignar los fondos de los beneficios inesperados para modificar sus planes de forma estratégica. En conjunto, estas informan la estructura de capital de su organización, que se define como la distribución, la naturaleza y la magnitud de los activos, los pasivos (deudas) y los activos netos (capital) que tiene una organización.4 Después de abordar las necesidades inmediatas correspondientes a la donación, la primera pregunta que los directivos de las organizaciones sin fines de lucro se deben plantear es “¿cómo usamos estos fondos para establecer nuestra estructura de capital para el éxito a largo plazo?”. La respuesta a esta pregunta varía según la organización, ya que no existe un enfoque universal. Puede resultar útil usar las métricas financieras, como los costos de los programas y los gastos reales, para guiar sus decisiones de asignación de una manera que respalde su misión y mejore su salud financiera y sostenibilidad en general. La siguiente tabla resume los diferentes pilares de activos que pueden conformar una estructura de capital sana.

Cuenta

Tipo de activo

Propósito

 

Cuenta de cheques

 

Capital operativo

Fondos para uso inmediato (gastos presupuestados, costos comerciales, deudas)

Ahorros/inversiones

Capital de trabajo

Fondos a los que se puede acceder para las operaciones

 

Ahorros/inversiones

 

Reservas

Seis meses de liquidez para gastos imprevistos

 

Inversión

Inversiones a largo plazo y dotaciones

Fondos que respaldan la visión y la sostenibilidad de la organización

Toma de decisiones referentes a los activos de las organizaciones sin fines de lucro

Al examinar su estructura de capital, la meta principal es determinar en qué se puede utilizar el dinero de una mejor manera para la expansión en el presente, en el corto plazo y en el futuro. ¿Es necesario expandir las reservas de efectivo? ¿Una parte del dinero debe financiar la expansión de personal? ¿Qué porcentaje de los fondos se aprovecharía de una mejor manera para la sostenibilidad a través de las inversiones? Determinar las respuestas a estas preguntas al final debería conformar la relación adecuada de tipos de activos para establecer su estructura de capital.

Necesidades a corto plazo

La evaluación de las necesidades a corto plazo implica examinar las deudas inmediatas y evaluar qué es a lo que la organización puede acceder actualmente en su cuenta operativa y sus reservas. ¿Qué cantidad se necesita tener en esa cuenta para financiar los gastos operativos diarios, tales como los salarios, el alquiler y los servicios públicos? Si hay una falta de liquidez, el cual es un desafío común que enfrentan las organizaciones sin fines de lucro debido a que las donaciones a menudo se destinan o restringen a ciertos usos, puede resultar lógico usar una parte de su donación de beneficio inesperado como garantía para establecer una línea de crédito para ayudar a aumentar su flujo de caja. También puede optar por asignar una parte a los esfuerzos de publicidad. Una campaña publicitaria debidamente elaborada que detalle cómo se utilizará la donación de beneficio inesperado puede servir para atraer la recaudación de fondos adicionales que los donantes están más dispuestos a dar a las organizaciones que son más estables en términos financieros. Estas son las preguntas adicionales que quizás deba considerar:

¿Le falta personal? ¿Les está pagando una remuneración adecuada a sus empleados?

  • ¿Sus programas tienen los recursos necesarios para funcionar con eficacia?
  • ¿Le queda chico su espacio actual? ¿Dicho espacio podrá alojar la expansión del personal o de los programas?

Inversiones a largo plazo y dotaciones

Si bien es importante tener en cuenta los casos de uso a corto plazo, es fundamental mirar a largo plazo para establecer la sostenibilidad financiera futura. Considere las áreas en las que su organización podría mejorar el apoyo financiero y la estabilidad, por ejemplo, al liquidar deudas o incorporar inversiones a su cartera de inversión. Crear una dotación es otra opción que puede permitir que las organizaciones sin fines de lucro prolonguen el impacto de una gran suma de dinero. Existen diferentes tipos de dotaciones con diversos niveles de restricciones. Sin embargo, en la mayoría de los casos la inversión principal se mantiene intacta mientras los intereses que se generan con el tiempo proporcionan ingresos adicionales para la organización. Además de mejorar la salud financiera general de la estructura de capital de la organización, una dotación puede obtener el apoyo del público y generar confianza con respecto a la capacidad que la organización sin fines de lucro tiene para llevar a cabo su misión declarada.

Mantenga el rumbo

Aunque la entrada de fondos provenientes de su donación de beneficio inesperado puede parecer tan abrumadora como emocionante, implementar un plan estratégico puede ayudarle a definir el camino a seguir. Utilice su estructura de capital como punto de partida para revelar las áreas que tienen necesidades inmediatas, las oportunidades de crecimiento y las posibles inversiones a largo plazo. Después, asegúrese de contar con el apoyo adecuado. Comuníquese con su asesor de inversiones para analizar cómo el Grupo de estrategias y soluciones para organizaciones sin fines de lucro de PNC Institutional Asset Management® puede ayudar a su organización a abordar sus metas de inversión particulares.

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El Grupo de estrategias y soluciones para organizaciones sin fines de lucro de PNC sirve como un socio dedicado que tiene el compromiso de empoderar a las organizaciones sin fines de lucro para que logren sus misiones. Al combinar la experiencia nacional con el conocimiento local, ofrecemos educación integral y asesoramiento sobre temas de gobierno, filantropía y sostenibilidad financiera, pues vamos más allá de la administración de activos a fin de brindar perspectivas viables que aborden los desafíos más apremiantes a los que se enfrentan las organizaciones sin fines de lucro. Gracias a nuestros fuertes vínculos con la comunidad, nuestra experiencia de liderazgo práctico en cuestiones de organizaciones sin fines de lucro y nuestra sólida presencia en el mercado local, ofrecemos soluciones significativas que optimizan los recursos y generan un impacto sostenible.

Para obtener más información, comuníquese con el equipo al correo electrónico IAMNonprofitStrategy@pnc.com.

Fuentes

1. The Giving Pledge

2. Yield Giving

3. Elisha Smith Arrillaga, Ellie Buteau, Christina Im y Seara Grundhoefer, Breaking the Mold: The Transformative Effect of MacKenzie Scott’s Big Gifts (Romper la tradición: el efecto transformador de las grandes donaciones de MacKenzie Scott) (Cambridge, MA: Center for Effective Philanthropy, 2025), https://cep.org/wp-content/uploads/2025/02/CEP_Breaking_the_Mold_FNL.pdf

4. Nonprofit Quarterly, Hidden in Plain Sight: Understanding Capital Structure (Oculto a plena vista: cómo entender la estructura de capital)